análisis de las comunidades " néo-catéchuménales "
					 por
			 Monseñor Luis Alberto Luna Tobar. Ocd,
			 arzobispo de Cuenca (Ecuador))
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Hermano muy querido,
		 he recibido de parte de los dirigentes de las Comunidades néo-catéchuménales del Ecuador una invitación a participar, con vosotros y de otros responsables mayores del Néo-catecumenado, a una reunión a Santo-Domingo. Muchas razones importantes me empujan a escribirvos, tanto para excusarme de mi ausencia como para agradecervos muy sinceramente vuestra invitación y también para darme una forma de presencia por medio de esta carta que quiero sincero, de buena fe y en todo punto conforme a la preocupación pastoral que se espera de un obispo.
		J'ai encontrados, en esta archidiócesis que el Señor me ha confiado hace once años, una presencia de veras impresionante de las comunidades néo-catéchuménales y una parte importante del clero secular y regular que las comunican e implicando se íntimamente. He siempre considerado que, en las ciudades, los nuevos movimientos apostólicos son un signo de los tiempos muy importantes y que constituyen un enriquecimiento de la pastoral de conjunto con tal que se llegue a integrar su presencia en la iglesia local por el sesgo de la vida parroquial.
		Puis, con el pasar del tiempo, he empezado a sentir de las corrientes divergentes y de las actitudes que hacen pregunta a la iglesia local y su organización; y estas dificultades procedían de posiciones sostenidas por los grupos del Néo-catecumenado y particularmente por alguno unos de sus dirigentes; de los sacerdotes muy cercanos del Camino se miran a tomar su distancia y de las gentes quienes de ello habían vivido la experiencia la abandonaron de modo espontáneo séquito a las exigencias casi esclavistas vividas en los grupos donde se han encontrado. He vivido estas realidades con dolor y de ello no es preocupado sin que eso afecta mi respeto para este movimiento que vehicular de los valores admirables; pero, confieso que he entrado en serio en estado de questionnement personal y he intentado de encontrar de las soluciones consultándovos vosotros mismo. catéchètes itinerantes y dirigentes que admiro. tanto para salir de mis dudas como para aclarar los puntos que presentan una incidencia mayor sobre la pastoral de conjunto y de que debo preocuparme en prioridad como obispo.
		Des personas de gran confianza, de una sabiduría sufrida, de un grande preocupaciones pastoral, que conoce profundamente vuestro movimiento y le habiendo pertenecido o él perteneciente todavía, animados también de un sentido común crítico que enriquece su discernimiento, me han alentado y alumbrado para componer esta carta como un amigo, un hermano y un pastor. A estas personas, todo de los sacerdotes, ofrezco mis agradecimientos para su celo y su espíritu libre. Poder contar con ellos, creo, es un don de Dios para una diócesis, para un agrupamiento o un movimiento apostólico. Con sus consejos y su luz, quiero decirvos, a vosotros Kiko y a vuestros colaboradores más cercanos, lo que encontramos de positivo y de negativo en el Néo-catecumenado, para que pueda trabajarse de modo más oportuno a ciertos cambios de actitudes y mismo de posiciones doctrinales, quiere universalizar tan no el movimiento y purificarlo de influencias más particularmente europeas quien, en nuestras tierras benditas, son rechazadas cada vez más.
		LE Positivos
El Néo-catecumenado, a pesar de un individualismo generalizado y característica del mundo urbano, ha formado de las comunidades. Son, en general, a la imagen típica que puede hacerse de la clase media. Hasta ahora, el indicio de perseverancia que se encuentra ha elevado.
El atractivo social que ejerce estas comunidades es notable entre los jóvenes y no se puede negarse que eso arrastre un cambio positivo en los comportamientos y el clima moral. Por calle de consecuencias, de numerosas vocaciones sacerdotales han encontrado su origen en el catecumenado.
La vida ascética impuesta y conseguida cerca de los adeptos del catecumenado arrastro en ellos un crecimiento importante de la vida espiritual en sus diferentes aspectos, cambio caracterizado por la rigidez, el desapego y la generosidad de grupo. Regresaremos necesariamente sobre estos puntos cuando analizaremos el negativo.
Puede negarse sólo, si preséntate una actividad que gusta y conviene bien al estilo de vida del Néocatéchuménat o a la mentalidad particular de sus catéchètes o de sus dirigentes, se podrá conseguirse de parte de las comunidades una participación a las actividades pastorales de la parroquia o de la diócesis. Claro que sí la actividad pastoral no conviene a su estilo., un problema surge inmediatamente.
La fidelidad a la Palabra de Dios y a la persona del papa es admirable. Como para la observación anterior, subrayaremos de las reservas sobre los dos puntos analizando el negativo. Subrayamos también que encontramos mucho fundamentalismo y una ausencia de la doctrina contemporánea sobre la iglesia, tanto al nivel del pensamiento de Latinoamérica que aquella de Vaticano II. Insistiremos más lejos en este punto.
- Su ritual y su música abren de las calles comunitarias evidentes. Crean una atmósfera piadosa y arrastrando. Tendremos todavía aquí algunas observaciones que templarán este elemento positivo por cierto miedo al plano pastoral.
		LE Negativos
Siento empezar esta presentación por una observación personnelle : Kiko, el culto de vuestra figura y de éste de Carmen juega, en las comunidades, un papel mágico inaceptable. Considero que los catéchètes enviados a diferentes épocas, y quien son de las gentes de muy gran valor personal, parecen tan mucho acondicionadas a promover la personalidad de los fundadores que eso de ello se convierte en un mito. Debéis poner un ejemplo de libertad y de liberación eliminando esta realidad que, por lo menos en los latinoamericanos, consideramos como peligrosos y profundamente anti-cristiana.
Se es hablado tanto con satisfacción de la formación de la comunidad en el néo-catecumenado que eso nos impide presentar una crítica de su organización interna y de su conciencia de haber alcanzado la perfección en su manera de formar y de mantener estas comunidades. Se las presenta como los única y únicas comunidades eclesiales. Y es frecuente encontrar no del desprecio hacia las otras comunidades de base apostólicos y de juntar de vez en cuando también a esta actitud de exclusión agresiva la conciencia de no poder labrar pastoralement en otros tipos de comunidades. Si esta acusación que he sentido personalmente muchas veces, no es percibida de los dirigentes, es conocida en muchos miembros de las comunidades y nos da la impresión que es inculcada e impuesta de arriba.
Estas reacciones y de otro todavía de orden doctrinal y moral, pero de tenor rigorista y fundamentalista, permiten pensar que en la organización del sentido comunitario hay una constante consigna viniendo de arriba que elimina el sentimiento de libertad característica de una verdadera caridad cristiana. El signo de esta forma de organización impuesta, que es muy característica y provoco de las reacciones negativas hacia el Néo-catecumenado, es el olvido marcado de cierto desprecio, que denota los formador del Néo-catecumenado para lo que es de origen latino-américaine : para la iglesia de Latinoamérica, para su teología y su pastoral, para las comunidades eclesiales de base, para nuestra opción para los pobres. Un sacerdote santo y prudente quien ha trabajado con vosotros varios años, me ha dicho textuellement : " On no valoriza, y para esta razón no se conoce, los documentos de Medellin y de Puebla, ni aquéllos de la iglesia ecuatoriana como las Opciones Pastorales ". Esto es un testimonio impresionante que golpea la conciencia de un pastor de un modo todo particular. Si la iglesia nos pide, en su prioridad pastoral para la nueva evangelización, tener para punto de salida un profundo inculturation, Kiko y Carmen deben abrirse a lo que es latinoamericano y renunciar a lo que ha sido formulado para las afueras europeas, para llegar a de las fórmulas duraderas y realistas para Latinoamérica.
- De momento de discernimiento llegamos a lo que constituye más fuerte crítico de un hermano. En mis conversaciones con ciertos catequistas, desde algunos años, he formulado este question : "¿ jusque donde vas el camino? ". Se me es dado siempre una respuesta muy personal y, para esta razón, siempre me he encontrado delante de un vacío, como si eran tomados entre, por un lado un grande admiración para el valor del camino y para aquéllos que camina y, por otra parte, una gran incertidumbre enfrente de su verdadero pensamiento teológico y espiritual. Esto es un punto que exige una seria revisión doctrinal de parte de los responsables del Néo-catecumenado. Apoyándome sobre de las búsquedas muy serias de mis colaboradores pastorales quien, son de una manera u otra muy cerca del camino néo-catéchuménal, vos sugiero una revisión teológica de todo lo que podemos conocer como siendo vuestra posición doctrinal :
Un constante divorcio entre la conciencia personal y la realidad social. Se interesa en el paso de la persona y a su progreso sin mirar su situación en una sociedad que tiene necesidad ella también de ser salvada y bautizada.
Una exaltación superficial y exclusiva del Parole : éste es ella que ilumina a la persona convertido, sin por eso interesarse en la articulación de la fe para que se convierta en caridad y solidaridad comunitaria.
Una lectura fundamentalista del Biblia con un acento distintamente orientado sobre su capacidad de provocar en mí una conversión personal. Pero el enigma queda en cuanto a la intervención de Dios en mi vida, y no se encuentra ninguna atadura con mi medio social y comunitario.
Una visión moral rigorista de la vida que va del individualismo satisfecho por el cumplimiento mecánico de los mandatos, sobre todo del sexto mandato. obsesivamente. hasta un acomodamiento de una multitud de injusticias institucionales, políticas, profesionales.
Un acondicionamiento autoritario que anula la libertad o, por lo menos, disminúyela y la acorta en bien de las circunstancias. Hemos hecho alusión a la presencia impresionante de las personas de Kiko y Carmen quienes constituyen como la doctrina y el poder de una iglesia paralela. Si alguien se de ello disocia, conoce ya la respuesta que él recevra : " le camino no es para ti ". Nunca no se podrá admitirse este carisma atribuido a de las personas que la comunidad néo-catéchuménale ha declarado " dogmes de fe ". Esto es un punto capital a revisar y a cambiar.
Consideramos que hay muchos vacíos, de distorsiones doctrinales y de faltas intencionales de fundamentos teológicos en la presentación doctrinal del Néo-catecumenado. Hemos mencionado ya un desprecio evidente para la teología que no es aquella de Europa. No hay ninguna atadura doctrinal con la cultura, con la época presente y sus manifestaciones. El " Croix glorioso ", y el " Serviteur de Yahvé no es de los signos y de las expresiones de esperanza pero de tortura. El lugar que se hace al miedo y al demonio adelanta las más sanas doctrinas y entra en la línea de una puerilidad asustadiza si no dépersonnalisante. No se conoce en el Néo-catecumenado la palabra justicia. La fe es más cerca del karma que la gracia.
***
He revisado estas notas con mucho dolor. Son muy sinceras y son nacidas del amor pastoral con que siempre he mirado el camino néo-catéchuménal. De vez en cuando, intentando abstraer de mi mismo y negándome yo mismo, me sigo se entregado cuenta que el Camino se presenta, por lo menos en mi percepción, como una iglesia paralela. Lo he sentido particularmente en las preguntas que necesariamente ponen en el caso tan grave de la formación de los sacerdotes y de su incardination al movimiento. ¿Para qué Iglesia estos sacerdotes son formados y quién sirve ellos? ¿El Catecumenado? ¿La iglesia? Creed bien, caros Kiko y Carmen, que éste que vos escribe ha sido formado de manera rigide : carme descalzo. He conocido de los " exceptions" y siempre los he criticado porque no conseguía verlas como eclesiales. Perdónadme la sinceridad rigurosa, y misma a ciertos momentos muy severos, de esta carta de un hermano.
DIAKONIA, no 66, junio de 1993,
UCA. NUCARAGUA, C.A,
PARA ESCRIBIRME :
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